Las calderas gas natural son una ingeniosa manera de dar paso a los avances de la ciencia, este poderoso equipo logra ofrecer grandes beneficios y quienes deciden adquirir e instalar, jamás querrán dejarlo o reemplazarlo.
Día a día las calderas de gas natural se reinventan en calidad, elementos diferenciadores y funcionalidades, se han convertido en una importante fuente de energía, no son dañinas para el medio ambiente, ofrecen agua caliente en cualquier parte del hogar y se gradúan según las necesidades de las personas con el propósito de ofrecer mayor confort.
La familia y el hogar merecen tener la mejor caldera
Elegir una es muy fácil, solo se necesita tener en cuenta lo siguiente:
- La calidad del equipo, esto se puede evaluar a través de su potencia térmica, el tipo de sistema de control, más regulación y sus dimensiones.
- Las calderas tienen dos tipos de mecanismo de uso, el manual y el digital, cada persona tomará la decisión de comprar de acuerdo a sus preferencias. Ambos funcionan perfectamente.
- Importante a la hora de seleccionar una caldera, las mejores son la de arranque rápido, su mecanismo de funcionamiento está graduado directamente con la llave del agua, lo cual da como beneficio que al abrirla las personas puedan tener agua caliente de forma inmediata.
- Es un error pensar que mientras más grande mejor, al contrario una dimensión óptima oscila entre los 360mm de anchura- 450mm y de altura 850mm con un peso total de 48kg.
- Las calderas de gas natural son de fácil instalación, utilización y mantenimiento, siendo estas una de sus mayores ventajas.
¿Por qué elegir gas natural y no de otro combustible?
El gas natural a diferencia de otros como el gas butano o propano, es considerado el mejor, ya que ofrece las siguientes ventajas:
- Mucho más económico
- Su combustión es más limpia, ya que no posee tanto carbono, siendo esta una gran ventaja para el cuidado del medio ambiente
- No contiene plomo ni metales pesados
- No libera dióxido de azufre (SO2)
- Los equipos que funcionan con gas natural reducen en al menos un 50% las emisiones y vibraciones